Nuestros clientes querían readaptar su vivienda unifamiliar a las necesidades actuales, dos niñas preciosas, trabajo en casa después de largas horas en la oficina.
Querían volver a su casa y que les resultase acogedora, recogida y alegre.
Para ello se cambió la iluminación del salón, se cambió la posición de una puerta para poder tener oculto el siempre desordenado perchero y se hizo una distribución que permitiese una zona de despacho, una de estar y otra de juego para las niñas